Capitel dedicado a Sixto II y a San Lorenzo (Lonja chica Catedral de Jaca)

Etapa 06 - de Satué a Biescas


Es el comienzo de un recorrido trasversal. Tenemos que cruzar las faldas del Pirineo para llegar hasta la cuna del Reino de  Aragón, en el valle de Hecho. Sería demasiado fácil cruzar la Val  Ancha y dirigirnos hacia el norte, de modo que le pondremos algo más de emoción y de paso nos acercaremos a los maestros constructores que en la alta edad media fueron sembrando esta parte de la comarca del Serrablo con hermosas iglesias románicas construidas al modo lombardo pero con un estilo propio al que da nombre la parroquial del pueblo de Lárrede.

Algunas de ellas son tan bellas y misteriosas que nos pueden llegar a hipnotizar como a mí me ocurre con la pequeña “San Juan de Busa”

Primero vamos a seguir la GR16 hasta Biescas. Ya hemos andado algún tramo de esta senda de gran recorrido que une Nocito con la villa de Biescas. No es muy buena porque está bastante descuidada, con señalización escasa y deficiente  mantenimiento, pero es lo que hay…




Estamos en Satué, su preciosa y cuidada iglesia de San Andrés, se construyó en el siglo XI y se estima que es el más puro ejemplo del estilo Larredense. Mejor ver la descripción de Antonio García Omedes.

Como otras del entorno, sufrió los duros embates de la última guerra civil aunque ni la puerta principal ni el ábside resultaron afectados. En los años setenta fue restaurada por la “asociación amigos del  serrablo”.





Salimos del lugar por la carretera hasta una curva en la que el GPS terco nos indica que giremos a la derecha, analizamos el terreno sin querer hacerle caso porque no hay ningún rastro que indique por allí un camino, pero conocemos de sobra la tozudez del aparato y terminamos por hacerle caso. Pisando rastrojos y apartando zarzas, de pronto aparece una traza de senda que poco a poco se va aclarando hasta convertirse casi en una pista que nos llevará sin problema al pequeño valle en que se sitúa el núcleo de Javierre del Obispo.









Me preguntaba por el origen de ese topónimo que da nombre a varios pueblos de la provincia hasta que un amigo me aclaró que proviene del término vascón, exeberri = casa nueva. Tiene sentido, tantos años litigando entre Navarros y aragoneses por la propiedad de la tierra, tenían que dar lugar a una amalgama de nombres mezcla de las lenguas que hablaban cada uno de esos grupos.





La iglesia parroquial fue construida en el siglo XVIII y se dedica a la Asunción.

Frente a ella casa Oliván, un hermoso palacio convertido en vivienda de turismo rural y que tal vez en la antigüedad pudo ser la vivienda de aquel obispo anónimo.


Salimos de la villa en dirección norte por una pista que desembocará en la carretera, al poco damos vista al valle glaciar del Gállego con la morrena de Senegué en primer término. Estamos a un paso de Lárrede y ya se aprecia la estilizada belleza de la torre de su iglesia. Cuando llegamos, contemplamos maravillados como el hombre allá por el siglo X pudo con pocos medios materiales desarrollar un arte constructivo que impresionase a sus congéneres como si hubiera sido planificado desde el mismo reino del cielo.




La iglesia románica de San Pedro de Lárrede, contiene en su edificación detalles que veremos en todo el resto del románico Serrablés. Es la obra maestra de un artista medieval bien formado y experto. A diferencia de las demás iglesias de este círculo, la planta es una cruz latina con las capillas laterales más bajas que la nave central.




En su esbelta torre, podemos presentir la voz del almuecín llamando a la oración puesto que más que una torre campanario, parece un minarete.




Hemos tenido suerte porque estaba abierta y ha sido posible fotografiar las preciosas parejas de columnas redondeadas que adornan la nave principal.



Después de dar una vuelta alrededor de todo el conjunto, continuamos nuestro camino hacia el norte por una pista que nos llevará a Oliván. Hacemos un pequeño desvío para disfrutar del pequeño templo que he nombrado al principio….




San Juan deBusa, mágico, enigmático, cautivador. Paras un rato en este lugar y empiezas a hacerte preguntas.

¿Por qué no se terminó el ábside como en las demás iglesias de alrededor?

¿Hubo un pueblo altomedieval a su lado?

¿En la arquivolta exterior que adorna la puerta de entrada hay algo escrito o es solo una decoración?

¿No sería esta iglesia un estudio experimental de arquitectura del maestro constructor de Lárrede para ir probando resultados de su obra?

Cuando te das cuenta, el tiempo se ha escurrido entre tus pensamientos y te prometes volver otro día, así una y otra vez.

El track de este pequeño desvio:






Seguimos el camino, volviendo sobre nuestros pasos hasta encontrar la senda que lleva definitivamente a Oliván.




Visitamos la tercera iglesia serrablesa, larredense y de estilo lombardo como las anteriores. Está dedicada a San Martín y en el esplendido siglo XVI (prospero y generoso en restauración del patrimonio) se amplió su superficie, seguramente porque aumentó la población, añadiendo una segunda nave y un pequeño porche en el lado sur.




Saliendo por la carretera en dirección oeste, enseguida encontramos un tablón que indica el camino a Biescas. Una senda bien conservada nos llevará hasta Orós Bajo y allí, al acercarnos hacia la pequeña Parroquial de Santa Eulalia, a lo lejos alguien nos pregunta si queremos visitarla.

- ¡Por supuesto! Faltaría más.


Al momento, se acerca a nosotros Gregorio Isabal que trae la llave, muy amablemente, nos invita a entrar y nos la enseña como su más preciada joya.




Se trata de una iglesia de la que él conoce todos los secretos porque la cuida, la mantiene y la muestra con merecido orgullo. Otro ejemplar precioso de románico del Serrablo, es un poco posterior, que las anteriores pero sigue manteniendo la misma línea.

Muchas gracias por su tiempo y sus explicaciones D. Gregorio.

Poca distancia nos queda ya hasta Biescas para terminar esta etapa hemos elegido caminar por la “vía verde” del Gallego, camino de reciente acondicionamiento al que accedemos saliendo de Orós por la carretera y tomando una pista hacia la izquierda en el lugar que sobre nosotros cruza un cable de alta tensión.






Hemos llegado a Biescas, capital del valle de Tena y tenemos duda sobre cuál de las dos iglesias parroquiales debería ser la que recibiera la visita del Grial si hubiera pasado por aquí. Las dos son de origen medieval aunque reconstruidas varias veces.



La del Salvador en la orilla derecha del Gállego y en la parte alta del pueblo y la de San Pedro en el barrio del mismo nombre en la otra margen.




Pasamos junto a la Torraza, casa fuerte construida en el siglo XVI para uso entre defensivo y ostentoso.





Podría ser este un lugar de paso para los hombres que llevaban entre su equipaje, el entonces modesto Santo Grial. Biescas ya existía desde mucho antes, es nombrada en escritos del siglo X, pero además, la presencia de primitivas iglesias y monasterios altomedievales en sus alrededores como San Pelay o San Bartolomé de Gavín nos sugieren una antigua y profunda cristianización de todo el valle de Tena.

Aquí el track 





Alternativa: de Javierre del Obispo a Lárrede por el barranco de Tramafoz.

Una interesante posibilidad para este recorrido, nos permitirá ver el Barranco de Tramafoz, incluso acercarnos a Latas, y ver el Puente de las Pilas. Famoso en la zona y que hasta hace poco tiempo incluso era cruzado por vehículos.




El track de la alternativa:




Otra alternativa (esta vez yo diria que imprescindible), para ir de Larrede a Olivan es desviarnos por el camino a Susín.

Este desvio nos permite admirar la torre de origen musulman de Lárrede, 



Y luego, llegar a Susin. Delicia en donde las haya, y aunque despoblado, la Asociacion Mallau Amigos de Susin, están haciendo una labor extraordinaria de recuperación del lugar




 
El trakc para recorrer esta alternativa:


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